GRANDEZA Y DESEO
Publicado: Dom Oct 28, 2012 15:07
Grandeza y deseo…
Grandeza de nuestro amor, yo tengo deseo de ti
bajo la luz de la luna gozar tu cuerpo gentil
¡Qué deseos de besarte y de sentirte en mis brazos!
y de pegarme a tu cuerpo y de sentirlo temblando
cuando tu piel y mi piel se rocen, amor, amando…
¡Cómo deseo que el mundo… ya no gire, esté parado!
bajo la luz de la luna con ardor incontrolado,
ganas de tenerte tengo, y sentir que tú me amas
y enredarme con tus senos y acariciarte la espalda
y que hagamos el amor hasta que despunte el alba.
Sin reposo, ni descanso… ganas de tenerte tengo
amándonos con ardor, ¡Qué quede parado el tiempo!
juntos tu cuerpo y mi cuerpo, unidos por el deseo…
yo quiero hacerte el amor,,, ganas de tenerte tengo
un día tras otro día, con fina brisa o con viento.
Y al amanecer el día, cuando se apaga el lucero
ahítos ya de pasión, de lujuria, y de deseo
empiece a girar el mundo, ¡Qué sepan que yo te quiero!
¡Qué no es sólo la pasión! Yo por ti siento amor tierno
eso lo juro ante Dios, pues Él sabe que esto es cierto.
Autor: Pablo Avendaño Lara
Grandeza de nuestro amor, yo tengo deseo de ti
bajo la luz de la luna gozar tu cuerpo gentil
¡Qué deseos de besarte y de sentirte en mis brazos!
y de pegarme a tu cuerpo y de sentirlo temblando
cuando tu piel y mi piel se rocen, amor, amando…
¡Cómo deseo que el mundo… ya no gire, esté parado!
bajo la luz de la luna con ardor incontrolado,
ganas de tenerte tengo, y sentir que tú me amas
y enredarme con tus senos y acariciarte la espalda
y que hagamos el amor hasta que despunte el alba.
Sin reposo, ni descanso… ganas de tenerte tengo
amándonos con ardor, ¡Qué quede parado el tiempo!
juntos tu cuerpo y mi cuerpo, unidos por el deseo…
yo quiero hacerte el amor,,, ganas de tenerte tengo
un día tras otro día, con fina brisa o con viento.
Y al amanecer el día, cuando se apaga el lucero
ahítos ya de pasión, de lujuria, y de deseo
empiece a girar el mundo, ¡Qué sepan que yo te quiero!
¡Qué no es sólo la pasión! Yo por ti siento amor tierno
eso lo juro ante Dios, pues Él sabe que esto es cierto.
Autor: Pablo Avendaño Lara