
¡Ese mordisco picante!
¡una sabrosura de paladar!
esa lamida de la carne
¡sazonada, llena de pique!
¡jugosa piel, rico añico!
los dientes piden potencia
ese éxtasis revienta de placer
un olor seductor, bien voraz
que aspira incesante al alma
no la suelta...¡posesiona!
no la exige....¡ambiciona!
no la confía...¡traiciona!
tan solo el gusto del sabor
hace compactar las sensaciones
mientras el fuego incite
mientras la sazón invite
mientras el poder existe
habrá tanta llama mortal
cederá indomables deseos
ponderá insaciables adeptos
catapulte imparables anexos
esos...¡añicos de pique!
mutarán en un ínfimo ósculo
consumarán indelebles estímulos
al son del cuerpo...¡repique!
al ton de la fragancia..¡salpique!
al ritmo de la voz...¡te pique!
©José Luis López