Blog-novela : Hasta llegar a ti...(22)
Publicado: Vie Nov 18, 2011 19:25
Llama a la policía Sandro!!!
Hablar de esos días previos a mi vuelta, es hablar de malos tratos psicológicos contra mi persona. No, no exagero nada. Me sometió a insultos y de repente me pedía perdón.
En sus ojos vi la locura, de repente brillaban y sonreían y en ocasiones se tornaban más duros que nunca. No es que no los hubiera visto ya así meses atrás, pero ahora daba hasta miedo!!!
Una tarde, sentadas en el sofá del living, estábamos viendo una serie que a mí me aburría. Me levanté y le dije, me voy un rato al chat a hablar con mis amigas. Así lo hice.
A los pocos minutos viendo que yo reía se acercó al ordenador y me ordenó que lo dejara. Tal y como lo digo, me ordenó!!!
Le dije que por qué y su única respuesta fue arrancar los cables y quitarme el USB que me permitía la conexión a Internet.
Empezó a gritarme como una loca y le pedí que me devolviera el USB. Me dijo que en esa casa se había acabado Internet, que ya no comunicaría con nadie. Le dije que era la única forma de poder comunicar con mi familia. Me acerqué a ella e intenté quitárselo de la mano. Me hinco las uñas provocándome heridas y se puso a gritar a Sandro que cogiera el móvil y que llamara a la policía que yo la estaba pegando. Por Dios!!!!
Sandro trajo el móvil mientras me miraba con una profunda tristeza.
No, no llamó a la policía, pero las mentiras que decía que yo la estaba pegando y su intento de que Sandro llamara a la policía me dejaron muy mal.
Se fueron de la habitación y yo me acosté quedando muda.
Escuché como cerraban la puerta de su habitación y fui a ver a Sandro que era el que realmente me preocupaba.
Dije por qué cerráis la puerta? (Nunca la cerraban).
La contestación de Ariadna fue que Sandro tenía miedo que los matara. Era mentira, Sandro me miraba con esa mirada que tanto conocía, esa que me decía Conce calla, no digas nada, ya se le pasará.
Esa noche no pude dormir, me la pasé llorando abrazada a la foto de mi hijo. No podía creer que esa mujer llegara a esos límites de crueldad.
A la mañana siguiente, antes de irse me dio el USB.
Mientras marchaban, me conecté y esperé a que mi padre se conectara. Le dije papá, necesito irme de aquí pero ya.
Evidentemente no le expliqué todo tal y como había sucedido, sólo que necesitaba irme ya.
Más tarde llamé a la agencia y le dije a la chica que me buscara un vuelo antes del que tenía previsto el día 29. Así lo hizo, me dijo, lo intentaré, pero que sepas que te van a cobrar más.
Me encontró un vuelo para el día 8 de Septiembre, quedaban unos 5 días.
Tuve que pedir de nuevo dinero a mis padres y esa misma mañana me llegó.
Cuando Ariadna llegó, mis maletas estaban hechas.
Me pidió perdón por la noche anterior pero yo, ya no quise saber nada más.
©Conxi
Hablar de esos días previos a mi vuelta, es hablar de malos tratos psicológicos contra mi persona. No, no exagero nada. Me sometió a insultos y de repente me pedía perdón.
En sus ojos vi la locura, de repente brillaban y sonreían y en ocasiones se tornaban más duros que nunca. No es que no los hubiera visto ya así meses atrás, pero ahora daba hasta miedo!!!
Una tarde, sentadas en el sofá del living, estábamos viendo una serie que a mí me aburría. Me levanté y le dije, me voy un rato al chat a hablar con mis amigas. Así lo hice.
A los pocos minutos viendo que yo reía se acercó al ordenador y me ordenó que lo dejara. Tal y como lo digo, me ordenó!!!
Le dije que por qué y su única respuesta fue arrancar los cables y quitarme el USB que me permitía la conexión a Internet.
Empezó a gritarme como una loca y le pedí que me devolviera el USB. Me dijo que en esa casa se había acabado Internet, que ya no comunicaría con nadie. Le dije que era la única forma de poder comunicar con mi familia. Me acerqué a ella e intenté quitárselo de la mano. Me hinco las uñas provocándome heridas y se puso a gritar a Sandro que cogiera el móvil y que llamara a la policía que yo la estaba pegando. Por Dios!!!!
Sandro trajo el móvil mientras me miraba con una profunda tristeza.
No, no llamó a la policía, pero las mentiras que decía que yo la estaba pegando y su intento de que Sandro llamara a la policía me dejaron muy mal.
Se fueron de la habitación y yo me acosté quedando muda.
Escuché como cerraban la puerta de su habitación y fui a ver a Sandro que era el que realmente me preocupaba.
Dije por qué cerráis la puerta? (Nunca la cerraban).
La contestación de Ariadna fue que Sandro tenía miedo que los matara. Era mentira, Sandro me miraba con esa mirada que tanto conocía, esa que me decía Conce calla, no digas nada, ya se le pasará.
Esa noche no pude dormir, me la pasé llorando abrazada a la foto de mi hijo. No podía creer que esa mujer llegara a esos límites de crueldad.
A la mañana siguiente, antes de irse me dio el USB.
Mientras marchaban, me conecté y esperé a que mi padre se conectara. Le dije papá, necesito irme de aquí pero ya.
Evidentemente no le expliqué todo tal y como había sucedido, sólo que necesitaba irme ya.
Más tarde llamé a la agencia y le dije a la chica que me buscara un vuelo antes del que tenía previsto el día 29. Así lo hizo, me dijo, lo intentaré, pero que sepas que te van a cobrar más.
Me encontró un vuelo para el día 8 de Septiembre, quedaban unos 5 días.
Tuve que pedir de nuevo dinero a mis padres y esa misma mañana me llegó.
Cuando Ariadna llegó, mis maletas estaban hechas.
Me pidió perdón por la noche anterior pero yo, ya no quise saber nada más.
©Conxi