RECUERDOS DE MI ABUELA

[electra]

Hoy vengo ante usted señora a traerle este ramito de rosas para pedirle me perdone por no saludarla ayer en el parque, como comprenderá mi señora estaba paseando con la abuela y ella por su edad no entiende de estas cosas; sabe el otro día vio al panadero con una muchachita que podía ser su nieta; dijo ¡que horror! a donde vamos a parar mire a este con 70 y ella con 26 tal vez, tan viejo; es un absurdo que hombres tan mayores busquen jovencitas aún no han aprendido nada de la vejez se creen sardinos los muy vagabundos, pero eso no es nada la vecina duerme hasta con el perro y con el gato pobre de su marido tan caballeroso que es, algún día la descubrirá y no quiero ver el lio que se formara, los niños no tienen la culpa son apenas unos chiquillos que vergüenza, que mal ejemplo les da la vampiresa de su madre.
No sabe lo peor la invite ayer a comer helado de fresa que tanto le gusta, y armo un zaperoco de aquellos, le grito al heladero sinvergüenza, atrevido, abusivo, que se cree a mi nieto no lo mire así que el es todo un varón no un maniquebrado como usted busque ayuda o muérase los de su clase no debieran existir, lo cogió a golpes y le dejo unos cuantos moretones intente por todos lados calmarla pero no pude parecía una fiera, se puso pálida, se le pararon los pelos que fue eso tan horrible, me dio tanta vergüenza con la gente que la miraba como si estuviera loca; ¡huy! que tal que supiera que el tío Alberto su hijo mayor es el novio o como se diga del distinguidísimo doctor Manuel el otorrino yo los he visto me he quedado callado para no mortificar a la viejita nunca entendería que los tiempos van cambiando, que la gente no piensa igual, todos somos diferentes vaya que muy diferentes.
Ve por que señora de mis amores no le he dicho lo nuestro no quiero ser el causante de quien sabe que, es mejor guardar nuestro secreto así evitamos habladurías, chismes de los vecinos y no quiero que le quiten la honra a la dueña de mi corazón me dolería mucho que le faltaran al respeto señora Inés.
Le ruego acepte mis disculpas y una invitación a comer en el mismo lugar de siempre yo cocinaré lasaña, me queda riquísima, que dice acepta la espero a las ocho en el apartamento no se preocupe nada debe llevar el vino lo tengo enfriando, el postre ya listo está, a las ocho no se le olvide la puerta estará entreabierta; será una velada de lo mejor mi querida Inés y no me venga con cuentos de que no puede por que yo se que no es así, póngase bien linda y ya sabe la espero, si no me cumple la cita iré a buscarla y como un ladrón trepare por su balcón solo para estar muy cerquita de la diosa que una fría mañana de octubre robo mi corazón.
Sabe usted atormenta mis sentidos cada vez que no cumple nuestra cita semanal y mi amor por usted mi querida Inés es más fuerte que un ciclón nada ni nadie podrá derrumbarlo jamás.
Le ruego disculpe que me vaya no quiero que mi abuela me vea y diga lo de siempre muchacho sinvergüenza que hace hablando con esa solterona amargada, duele mucho su jalón de orejas y que me dices de los pellizcos me deja sangrando; eso que no sabe que muero de amor y todos mis pensamientos son para usted por que no puedo sacarla de mi mente, la he tatuado en mi corazón para siempre.
Ve usted ya me pillo la viejita ahí viene me voy antes que me agarre; no me pegue abuela yo no estaba haciendo nada malo un saludo no se le niega a nadie no hay que ser maleducado o ya se le olvidaron todas las buenas enseñanzas de mi abuelo Matías.
Vaya con ese vejete con cara de santo como decía el padre Nicolás y no sabia que de santo no tenia ni un pelo no se enamoro de la sobrina de tu abuela Clementina, ese era otro viejo perro que asco me da recordar lo que hizo; no se parecía en nada a tu abuelo Guillermo ese si era un gran hombre, recuerdo cuando nos conocimos mi padre hombre muy recio se sentaba en la sala con los dos para evitar un desliz, que tal en la boda lo tenía loco con tantas advertencias y yo ya quería irme para mi nueva casa; después que nació Amelia la cantaleta comenzó de nuevo, ojo muchacho debes tratarlas bien y cuidado con tonterías o te las veras conmigo la escopeta la tengo lista y no quiero usarla en Mi yerno me oyó bien o se lo repito de nuevo y así cada vez que algún acontecimiento ocurría, fue el mejor esposo y padre del mundo, tu abuelo si era un gran hombre de esos que ya no se ven en estos tiempos, vamos no quiero verte con esa fulana que busca marido a costa de lo que sea o es que se te olvido lo mucho que persiguió a Alfonso el hijo de Concepción la lavandera, pues a mi no.
Pero abuela que le pasa yo no soy de esos por quien me toma cree que estoy embrujado como Alfonso no yo no voy a quitarme la vida y menos por una mujer que puede ser mi madre o peor aun mi abuela.
Lo puedo creer ya que he visto como su mirada se torna alegre cada vez que lo ve y se que lo persigue por doquier, mire mijo yo conozco a las solteronas con ganas de buscar marido a costa de lo que sea y así no quedarse para vestir santos, si fuera bonita pero es una flaca espantosa por eso no tuvo marido Y usted no será comidilla de todos en el pueblo, no señor no lo permitiré así que vamos a casa rápido.
Ricardito yo se por que se lo digo no quiero que sufra busque a una niña de su edad sea feliz disfrute su juventud, no se complique evite habladurías, no deshonre a la familia no quiero estar en boca de todos ya sabe que los chismes abundan por todas partes reciba mi consejo mijito.
Abuela querida no se preocupe nada de eso pasará conmigo se lo aseguro yo a usted, pero no me jale más las orejas mire que me las va arrancar y me duelen mucho las debo tener coloradas o más bien sangrando por su culpa, los pellizcos no por favor se lo ruego, suélteme me hace daño mire más bien ahí viene la señora Amelia a toda prisa que querrá.
Vámonos rápido no quiero verla lo que me hizo no lo puedo disculpar fue una falta de respeto decir que yo era una chismosa vamos corra mijo antes que nos vea.
Al fin estamos lejos acompáñeme al mercado hay que comprar las cosas para los frijoles no ve que viene el señor Rodrigo a comer y no quiero quedar mal, traerá noticias de tu padre, la casa debe quedar impecable para su visita esta noche así que hoy póngase su mejor traje para recibir tan grata visita; pero es que tenía planes para esta noche ineludibles, lo siento no puedo asistir.
A mi no me venga con cuentos, ineludible no hay nada solo la muerte y las noticias son importantes tal vez sepamos cuando regresará por fin tu padre hace ya bastante que se fue el condenado.
Ya sabes a las siete será la comida espero traiga noticias buenas, no tan malas como la otra vez.
Vaya ahora que hare Inés me espera para la cita semanal sino voy se enojará y no quiero perderla ya se que hare el tío Alberto será mi salvación como siempre; el sabe que si no lo hace su madre Margarita sabrá lo suyo con el otorrino y no quiero imaginarme lo que le pasaría.
A quien se le ocurre vestirse así, es un horror pero que veo es Alberto, a mi me va a dar algo acompáñame debo hablarle que fachas estas no parece de mi familia, es una vergüenza mire eso que pantalones no son propios un cuarentón, que se cree un chiquillo hay que comportarse de acuerdo a la edad va a desacreditar a mi familia y no lo voy a permitir no señor jamás la permitiré mientras viva.
Venga para acá Alberto no ve la afrenta que le hace a nuestro linaje con esa vestimenta tan rara, le exijo ahora mismo que se cambie, compórtese como todo un hombre de leyes y deje esa manía de vestirse como si fuera un jovencito que ya no está para eso madure por Dios o quiere que lo haga aprender por las buenas o por las malas soy su madre y mientras viva en esta tierra creo que merezco gran respeto, no haga lo que hizo su tía Clara que se fue con el esposo de Antonia su mejor amiga deshonro su linaje como si fuera una cualquiera, huy que pena me da por ella, por eso se me fue mi dulce Guillermo para la eternidad no lo soporto, no sabe la falta tan grande que me hace, ya verán muy pronto estaré con el así podrán descansar ustedes de mi, que no le agradecen a una nada de tantos sacrificios para que sean hombres de bien, tratados como tal por esta sociedad tan falsa y corrompida que se cree de lo mejor.
Señora Inés hoy no le cumpliré la cita y no lo hare jamás así que búsquese otro la abuela Manuela tenía razón usted no quiere a nadie solo busca placer en jóvenes como yo para no sentirse tan vieja, es una lastima que se valore tan poco; menos mal que murió sin saber que usted me tenía embrujado, así como tampoco supo lo de su hijo Alberto con el otorrino quien lo engañaba con el hijo del alcalde, ni lo de papá que era el amante de la vampiresa como le decía ella a la vecina.
Ahora debe estar feliz creyendo que su familia era la mejor y más distinguida de este pueblo.
Pobrecita de ella tan ingenua que era, nunca la olvidare fue tan linda conmigo siempre, así me jalara las orejas casi hasta arrancármelas se que era por mi bien; sabe ella se ríe a carcajadas de usted la escucho muy clarito y le manda decir que se porte como una vieja solterona y fea que es con dignidad.
Me voy me aceptaron en el seminario ella está tan feliz por eso dice que me acompañará siempre para que sea un cura muy santo como su hermano monseñor correa que en paz descanse.
La invito a olvidarme yo lo hice hace tiempo, no sentía nada hacia usted era su brujería la que me tenía atrapado entre sus redes y no pudo conmigo.
Hasta nunca señora Inés mi abuela Manuelita y yo nos vamos nos espera el autobús son cuatro horas de camino para llegar al seminario, ella se marea debo dormirla hasta que lleguemos para que el viaje sea placentero y yo este tranquilo durante el largo viaje.
Vamos abuela nos coge la tarde, estoy tan feliz de saber que usted ha venido a acompañarme; si ya se que el abuelo y mi madre están orgullosos de mi me lo ha dicho como mil veces y yo solo pido al buen Dios que me la regrese de nuevo me hace mucha falta sobre todo ahora que decidí ser cura, sabe sentí ese llamado hace mucho solo que no quise escucharlo y es una lastima no haberlo hecho antes de que mi viejita linda se fuera para siempre; pero abuela yo le prometo que la primera misa que celebre será en su honor, tengo tanto que agradecerle yo se que usted estaría emocionada de saber que seguí los pasos de su hermano.
Vamos ya llegamos, no se mareo con tantas curvas verdad, por que yo si y mucho.
No se vaya quédese se lo suplico, no sea tan mala, no ve que me hace mucha falta, sin usted mi vida será una eternidad no se como soportar su ausencia; hoy que nos encontramos después de tanto tiempo no quiero llorar más su partida me duele en el alma recordarla y tengo que llorar por que ya no la veré más; solo le pido que guie mi camino para ser un honesto y buen cura.
Adiós espero volverla a ver es una lastima que no pueda quedarse me siento con el corazón desierto, vacio sin su amor mi dulce viejita del alma quiero que sepa que nunca la olvidaré abuelita del alma.
Electra Mayo 16-22/09
Este cuento no se trata de mi abuela sino de una vecina que se la pasa de chisme en chisme.

[TARDE GRIS]

Bellisimos recuerdos nos compartes,
saludos cordiales y cuidate siempre...