Tu mundo de cristal
Publicado: Sab Feb 28, 2009 04:10
No es nada, apenas un engaño que tú mismo reflejas en todos los espejos que son de tu dominio, realeza. Tu mundo es de cristal, con amores en espiral, tus chicas yacen rotas, sin cabeza, por toda la habitación, tus flores de papel cada noche empiezan a arder a eso de las tres, tu mascota, un ruiseñor que no se sabe cantor, tu ropa es la sucia piel que tú mismo te has impuesto... te crees Dios, un dios encerrado en un cuartel, un dios de iglesia sin cruz ni santos por doquier, te sientes hombre cruel, cuando acaricias con besos tiernos como la miel, siempre enfermo por tus engaños, vas por la vida haciendo daño, sin embargo dicen tí, que eres el más bueno de nuestro grupo familiar. Nunca me has aceptado, ya lo sé, siempre temiste que te causara algún daño, siempre te mantuviste alejado... eres el hombre que no quiso crecer.
Todas tus chicas se han marchado, por tí todas lloraron, ahora tu mamá, vieja enferma, en su pecho te va a acoger. Es la historia de tu vida que has trazado con papel, tu música preferida te ha llenado los cielos de hiel. Eres quien no pudo ser, el que esperaba en el andén, más se hizo de noche y no se subió a ningún tren... así pues, amigo mío, te tienes tan solo a tí. Y a tu madre, demasiado fiel.
Quisiera poder decirte que ya ni siquiera tú estás por tí, que todo ya lo has perdido, que lo tiraste a la mar para que se ahogara. Pero eres de esos tipos extraños, que siempre rompen la baraja y cuando salen a la calle enfurecidos, se sacan un as de su manga. Nunca es tu última oportunidad y eso te causa un gran mal. Porqué siempre vuelves a fallar. Ojalá tu castillo ardiera hasta su raíz, las piedras se desgranaran hastar restar arena, no quedara ni rastro de él... y así, desnudo y sin nada, a la vida de una vez te enfrentaras.
Todas tus chicas se han marchado, por tí todas lloraron, ahora tu mamá, vieja enferma, en su pecho te va a acoger. Es la historia de tu vida que has trazado con papel, tu música preferida te ha llenado los cielos de hiel. Eres quien no pudo ser, el que esperaba en el andén, más se hizo de noche y no se subió a ningún tren... así pues, amigo mío, te tienes tan solo a tí. Y a tu madre, demasiado fiel.
Quisiera poder decirte que ya ni siquiera tú estás por tí, que todo ya lo has perdido, que lo tiraste a la mar para que se ahogara. Pero eres de esos tipos extraños, que siempre rompen la baraja y cuando salen a la calle enfurecidos, se sacan un as de su manga. Nunca es tu última oportunidad y eso te causa un gran mal. Porqué siempre vuelves a fallar. Ojalá tu castillo ardiera hasta su raíz, las piedras se desgranaran hastar restar arena, no quedara ni rastro de él... y así, desnudo y sin nada, a la vida de una vez te enfrentaras.
