Estás ahí distante, no puedo aún aceptarte tal cual eres. Visitas mis espacios cada día y cada noche. Lejanía extraña y taciturna, compañera de distancias, vanidosa y altanera en la indolente soledad.
Pienso en ese instante que se repite tantas veces en mis memorias como una constante evocación de abrazos y miradas lejanas sin regreso. Sabes que en tu vasta intensidad se esfumaron mucho sueños, algunos vagan en el limbo de espejismos inalcanzables, se presentan distantes en el mundo que se aleja y no puedo atrapar entre mis manos. Solo el poder intangible del corazón logra atesorar aquellos esenciales a sus ojos.
Ha pasado el tiempo en su batallar cuesta arriba y cuesta abajo, en esa pendiente que se transforma en parábola cuando tocamos al universo ó cuando nos hundimos en el subterráneo de la soledad y la nostalgia. No existe la medida exacta para dimensionar toda tu existencia, solo sé que estás ahí, y me hablas cuando creo olvidar.
Lejanía que escribes la leyenda de un pasado, y multiplicas el presente en cada empeño, enajenas las angustias que se quedan en el umbral de los olvidos, cierras los ciclos que cansados caminaron contigo dejando sus huellas. Y sigo aquí, atrapada en silencios mortales y añorando acercar el tiempo que envejece y que cierra capítulos del libro que floreció en la primavera para desvanecer su luz entre suspiros.
No hay vuelta atrás. Hágase la luz entre las sombras y empezará a escribirse el nuevo libro, abriendo laberintos a esta espera que lejana, se transforma en desafío.
Y me refugio en ese yo que no lastima,
que cautiva cual ondina mis anhelos
y en océano de ideas van las rimas,
como sílfides espíritus del viento,
tratando de acercar la lejanía
cuando surca el universo y sus misterios.
Ya ves, sueño despierta Lejanía,
no puedo separarme de tu tiempo
y en el azar celeste del encuentro
sellaremos la sublime despedida.
Y me refugio en el rincón de sus estigmas,
al vibrar en cada letra de los versos
la más bella expresión en poesía,
que se aleja hacia el Caribe de mis sueños.
Lejana te dibujo fantasía,
Atenas del umbral de mis recuerdos,
despierta yo te sueño entre mis rimas
y evoco en el salitre de tus besos,
la suave sensación de tus palmeras
y el eco del danzón en cada sueño.
que cautiva cual ondina mis anhelos
y en océano de ideas van las rimas,
como sílfides espíritus del viento,
tratando de acercar la lejanía
cuando surca el universo y sus misterios.
Ya ves, sueño despierta Lejanía,
no puedo separarme de tu tiempo
y en el azar celeste del encuentro
sellaremos la sublime despedida.
Y me refugio en el rincón de sus estigmas,
al vibrar en cada letra de los versos
la más bella expresión en poesía,
que se aleja hacia el Caribe de mis sueños.
Lejana te dibujo fantasía,
Atenas del umbral de mis recuerdos,
despierta yo te sueño entre mis rimas
y evoco en el salitre de tus besos,
la suave sensación de tus palmeras
y el eco del danzón en cada sueño.
Aimée Granado Oreña / Gota de Rocío Azul