(Décimas a mis lectores)
Tan solo con mi alma abrigo
entregarle mi trabajo,
con esmero y sin relajo
a mi amiga y a mi amigo.
Constantemente consigo
lo que siempre pido al cielo,
no interesa mi desvelo
ni tampoco si me canso
porque sé que mi remanso
cuando enseño, es mi consuelo.
Yo nací para servir,
y ese lema es mi destino.
He labrado mi camino
que incentiva mi existir.
Solo pido que al morir
me sepulten sin tristeza
y prometan con firmeza
cultivar la pöesía
con muy buena ortografía,
con orgullo y con nobleza.
- - - - - - - - -
Mariano Bequer.
Maracaibo, 07/04/12