Mala Praxis
Publicado: Mar Abr 26, 2011 21:11
MALA PRAXIS
Midiendo la distancia entre el baño y la cocina,
Acumulando mí enojo,
Atragantándome de insólitas preguntas,
Preguntas que al final no desembocaban en respuestas.
De cuando en cuando cumpliendo con expectativas,
Expectativas deambulantes de una sociedad caucásica,
Llena de liberalismos Europeos,
Llena de acciones diarias de grandeza,
Llenas de aclaraciones seguras,
Inéditas.
Caspa de la cúspide de lo etéreo,
Obligadamente tal parece que así,
Materialista. Hasta la médula.
Médula sicalíptica del desorden mental de la sociedad.
Pero lavable;
Querida catarsis iónica…Catarsis Verduga.
Ya asqueado,
Violado mental y moralmente,
Destella en mí ser, la idea de limpiar mi alma y mi cuerpo.
-Hola madre querida, madre,
Incondicionalmente tu hijo proclama a tu persona,
A la que debo explicaciones,
A la que le debo mi vida,
…a la que le debo mis males, mis penurias, mis desdichas,
Mis calumnias, mi otredad,
Mis errores…Mi enfermedad.
Aquí yace,
Aquí, y ahora mis restos mortales,
Solo sin más que lo efímero,
Solo sin más que lo poético,
Sin más que tus dedos tenues acariciando mi mollera,
La única culpable…
Mi delirium tremens cobijado,
Entre tiernos recuerdos,
Nobles.
No por naturaleza,
Por necesidad.
Libero lo que queda de mi suspiro y absorbo,
Extermino a su vez…
¡Con que facilidad mata el ser humano!,
¡Con cuanta indiferencia!...
No obstante,
¡Con que tranquilidad!,
Acto sucio y ávido de inocencia,
Pero peligroso,
Insospechablemente animal, moralmente…
Aceptado.
-Madre, ¡saluda a tu hijo prodigio!,
Saluda a tu creación malsana,
A la mandrágora en la cadena del pecado,
Al silencio entre el punto y aparte,
Entre la bondad y el desequilibrio.
Midiendo la distancia entre el baño y la cocina,
Acumulando mí enojo,
Atragantándome de insólitas preguntas,
Preguntas que al final no desembocaban en respuestas.
De cuando en cuando cumpliendo con expectativas,
Expectativas deambulantes de una sociedad caucásica,
Llena de liberalismos Europeos,
Llena de acciones diarias de grandeza,
Llenas de aclaraciones seguras,
Inéditas.
Caspa de la cúspide de lo etéreo,
Obligadamente tal parece que así,
Materialista. Hasta la médula.
Médula sicalíptica del desorden mental de la sociedad.
Pero lavable;
Querida catarsis iónica…Catarsis Verduga.
Ya asqueado,
Violado mental y moralmente,
Destella en mí ser, la idea de limpiar mi alma y mi cuerpo.
-Hola madre querida, madre,
Incondicionalmente tu hijo proclama a tu persona,
A la que debo explicaciones,
A la que le debo mi vida,
…a la que le debo mis males, mis penurias, mis desdichas,
Mis calumnias, mi otredad,
Mis errores…Mi enfermedad.
Aquí yace,
Aquí, y ahora mis restos mortales,
Solo sin más que lo efímero,
Solo sin más que lo poético,
Sin más que tus dedos tenues acariciando mi mollera,
La única culpable…
Mi delirium tremens cobijado,
Entre tiernos recuerdos,
Nobles.
No por naturaleza,
Por necesidad.
Libero lo que queda de mi suspiro y absorbo,
Extermino a su vez…
¡Con que facilidad mata el ser humano!,
¡Con cuanta indiferencia!...
No obstante,
¡Con que tranquilidad!,
Acto sucio y ávido de inocencia,
Pero peligroso,
Insospechablemente animal, moralmente…
Aceptado.
-Madre, ¡saluda a tu hijo prodigio!,
Saluda a tu creación malsana,
A la mandrágora en la cadena del pecado,
Al silencio entre el punto y aparte,
Entre la bondad y el desequilibrio.